Anafe empotrable a gas o vitrocerámico eléctrico: ¿Cuál consume más?

Cuando elegís un anafe empotrable a gas para tu cocina, el consumo de energía es uno de los aspectos más importantes a considerar. Tanto los que son a gas como los eléctricos tienen ventajas y desventajas en cuanto a eficiencia, costo y practicidad. 

A continuación, te ayudamos a entender las diferencias para que puedas elegir el que mejor se adapte a tus necesidades.

Consumo energético del anafe empotrable a gas

Hay muchos tipos de anafes empotrables a gas, estos son una opción tradicional y bastante popular en Argentina. Funcionan mediante la combustión de gas natural o envasado, lo cual permite un control de temperatura inmediato y preciso. Esto significa que, en términos de eficiencia energética, el gas suele ser una opción económica y confiable.

Características del anafe a gas:

• Consumo eficiente: Generalmente, el gas es más económico que la electricidad.
• Control rápido de temperatura: Ideal para recetas que requieren cambios rápidos en el calor.
• Compatibilidad: Se adapta a una amplia variedad de utensilios de cocina.
• Independencia del suministro eléctrico: Si hay cortes de luz, podés seguir usándolo sin problemas.

Además, si ya tenés una conexión de gas natural en casa, la instalación de un anafe de este tipo es sencilla y rápida, aunque siempre debe realizarla un profesional para garantizar la seguridad.

Consumo energético del anafe vitrocerámico eléctrico

Los anafes vitrocerámicos eléctricos, por su parte, son conocidos por su diseño moderno y facilidad de limpieza. Funcionan mediante resistencias eléctricas ubicadas bajo una placa de vidrio, lo que proporciona una distribución de calor uniforme y estable. Aunque el consumo de electricidad suele ser más alto, algunos modelos de inducción son más eficientes.

Ventajas del anafe vitrocerámico eléctrico:

• Estética moderna: La superficie lisa y de fácil limpieza aporta un estilo contemporáneo a la cocina.
• Seguridad: Muchos modelos incluyen funciones de apagado automático y bloqueo para niños.
• Distribución uniforme del calor: Ideal para cocinar platos que requieren calor constante.
• Opción de inducción: Dentro de los modelos eléctricos, los de inducción consumen hasta un 30% menos de electricidad.

Es importante tener en cuenta que los anafes eléctricos dependen completamente del suministro eléctrico, por lo que en caso de cortes de luz, no podrás utilizarlos. También es necesario verificar si tenés una toma de corriente adecuada para este tipo de electrodomésticos.

Comparación de costos y eficiencia energética

Al evaluar el costo operativo, conviene analizar tanto el precio de los combustibles como la eficiencia de cada tipo de anafe. En Argentina, el gas natural sigue siendo una opción más económica que la electricidad. Sin embargo, en algunos casos, el consumo energético puede variar según el tipo y la frecuencia de uso del anafe.

Para ayudarte a decidir, te mostramos un breve resumen comparativo:

• Costo del combustible:
  • Anafe a gas: Más económico por unidad de energía.
  • Anafe eléctrico: Más caro, aunque las placas de inducción pueden ahorrar hasta un 30% de energía.
• Control de temperatura:
  • Anafe a gas: Ofrece un control inmediato y preciso del calor.
  • Anafe eléctrico: Proporciona una distribución uniforme del calor, ideal para cocinar a fuego lento.
• Eficiencia general:
  • Anafe a gas: Consumo energético eficiente, especialmente si usás gas natural.
  • Anafe eléctrico de inducción: Es más eficiente que los modelos eléctricos convencionales, aunque su precio suele ser más alto.

Factores adicionales para elegir 

Al elegir entre anafe a gas o eléctrico, también debés tener en cuenta otros aspectos como la infraestructura de tu hogar y tus preferencias de seguridad. Estos son algunos factores adicionales que te pueden ayudar a decidir:

• Instalación y ventilación: Los anafes a gas requieren una instalación profesional y ventilación adecuada.
• Seguridad: Los anafes eléctricos incluyen funciones como apagado automático y bloqueo, lo cual es ideal para hogares con niños.
• Versatilidad de utensilios: Los anafes a gas son compatibles con cualquier tipo de olla o sartén, mientras que los de inducción pueden requerir recipientes específicos.

El consumo entre un anafe empotrable a gas y uno vitrocerámico eléctrico va a depender del tipo de consumo energético.