Cómo limpiar el horno eléctrico: la guía completa

Aprender cómo limpiar el horno eléctrico no tiene por qué ser una odisea. Con algunos consejos prácticos y el uso de productos adecuados, podés devolverle su brillo inicial, asegurándote además de que funcione a la perfección y prolongar así su vida útil. 

Paso 1: preparación y seguridad

Antes de comenzar con la limpieza de tu horno eléctrico, asegurate de que esté completamente apagado y frío al tacto. Desconectalo la fuente de energía para evitar cualquier accidente. 

Prepará tu espacio de trabajo colocando todos los productos de limpieza que vayas a usar a mano. Esto incluye guantes de goma, esponjas no abrasivas, y un limpiador específico para hornos eléctricos que puedas encontrar en el mercado.

Paso 2: limpieza interna

Comenzá por retirar las bandejas y rejillas del horno. Estos componentes deben limpiarse por separado con agua caliente y un detergente suave. Para el interior , utilizá un producto diseñado específicamente para limpiar el horno. 

Aplicá el limpiador en las paredes y la base del horno, dejándolo actuar el tiempo recomendado. Luego, con una esponja húmeda, retirá los residuos y el producto de limpieza. Es importante que no uses utensilios metálicos o abrasivos que puedan dañar el esmalte interior del horno eléctrico.

Una vez que hayas removido la mayor parte de la suciedad, es probable que necesites repasar las áreas más difíciles. Para esta parte, podés usar una esponja suave ligeramente impregnada con el limpiador. Recordá limpiar también la puerta del horno y su junta, ya que es común que se acumulen restos de comida en estas áreas.

Después de limpiar el interior, asegurate de enjuagar bien todas las superficies con una esponja limpia humedecida para quitar cualquier residuo de producto de limpieza. Este paso es clave para evitar olores y humos la próxima vez que uses el horno.

Paso 3: la parte externa

Para limpiar la parte externa, comenzá por pasar un paño suave o una esponja ligeramente humedecida para eliminar el polvo y las manchas superficiales. Aplicá un limpiador multiusos sobre un paño limpio y pasa suavemente sobre las superficies externas, incluyendo la manija y el panel de control.

Para limpiar la puerta del horno, podés usar un limpiador de vidrios o una mezcla de agua con vinagre (en proporciones iguales) para remover manchas y huellas dactilares. Rociá la solución directamente sobre un paño y limpiá el vidrio con movimientos circulares para evitar rayas. Asegurate de no usar productos abrasivos o esponjas que puedan rayar o dañar el acabado del vidrio.

Una vez que hayas terminado de limpiar todas las superficies externas, secá bien con un paño totalmente seco y suave para evitar marcas de agua y para darle un acabado pulido y brillante. Antes de enchufarlo nuevamente, asegurate de que esté completamente seco.

Saber cómo limpiar el horno eléctrico implica tener en claro que el proceso no termina con una limpieza profunda. Realizá una limpieza ligera después de cada uso, retirando cualquier residuo o derrame tan pronto el horno se enfríe. Esto va a ayudar a prevenir la acumulación de suciedad y grasa, facilitando mucho la limpieza profunda futura.